Autor: Leo Mellado

Renault, así como toda la industria automovilística mundial, está pasando por duros problemas financieros estos días, incluyendo la desvinculación de 15.000 empleados. Aún así, como hay una vida más allá de la pandemia, la marca ha hecho públicos sus planes para incrementar su oferta de modelos eléctricos, esta vez en el campo de los SUV. En efecto, si el coronavirus lo permite, dos modelos serían revelados antes de 2022.

De acuerdo a la marca, se trata de modelos cuyo tamaño estará por encima del Zoe y pelearán en ese segmento en el que la demanda de los clientes es cada vez mayor.

En junio del año pasado, durante la presentación de la segunda generación del Renault Zoe, el jefe de Ventas y Marketing de la marca, Emmanuel Bouvier, mostró una diapositiva con la gama completa de vehículos eléctricos del fabricante. En ese momento estaba formada por seis modelos identificados a los que se sumarán otros dos, sin nombre ni tipología, que completarían su catálogo eléctrico para 2022.

Uno de los candidatos, que ya había sido ratificado por Renault, es un nuevo SUV eléctrico del segmento C, de tamaño superior al Captur. Sin embargo, el jefe de vehículos eléctricos de Renault, Gilles Normand, confirmó en una entrevista concedida a la revista Autocar, que no vendrá solo. El fabricante francés lanzará un segundo SUV eléctrico, probablemente de un tamaño superior.

Según Normand, Renault trabajará intensamente para aprovechar las claves de un formato como este. La primera, la ventaja que ofrece un vehículo elevado a la hora de situar la batería bajo el habitáculo y los motores más cerca de las ruedas, lo que se traduce en un habitáculo de mayores dimensiones. Pero esta ventaja “arrastra” un inconveniente: la aerodinámica y el peso, que en los vehículos eléctricos es clave para reducir los consumos. En este punto, Normand afirma que podrían ofrecer “hasta 550 kilómetros de autonomía real”.

De acuerdo al ejecutivo francés, “los compradores se están dando cuenta de que los vehículos eléctricos son seguros y agradables, y que ya pueden realizar viajes mucho más largos que los vehículos eléctricos de primera generación”. De paso, estas afirmaciones parecenr enterrar los rumores que hablaban de un eléctrico hatchback de tamaño similar al Megane.

Especulaciones

Estos dos nuevos modelos emplearán la plataforma eléctrica CMF-EV desarrollada junto a Nissan. Su arquitectura escalable permite modificar el largo y el ancho de manera que pueda albergar desde compactos del segmento B, hasta modelos más grandes del segmento D, independientemente de que se trate de hatchbacks, sedanes, SUV o monovolúmenes.

El primero de los SUV de Renault, ya confirmado anteriormente, tendrá un tamaño similar al del Kadjar, un modelo orientado principalmente al mercado europeo, que por su parte, recibirá una variante híbrida enchufable en su segunda generación. El segundo está todavía por confirmar. Un SUV del segmento B para recorridos urbanos podría poner en peligro las ventas del Zoe, que ya de por sí tiende a un formato elevado.

Por esta razón, los analistas especulan con que en realidad el segundo SUV sería más ambicioso, con capacidad para llevar a 7 pasajeros. La competencia en este segmento, el de los SUV eléctricos de más de 4,5 metros, incluyen el Audi e-tron, el Mercedes EQC o el Jaguar I-Pace, un poco más pequeño. Próximamente se incorporarán el Volkswagen ID.6 y el que quizás sea su rival natural, el Nissan Ariya, que se fabricará sobre la misma plataforma y con el que compartirá componentes.