Autor: JAVIERA LASTRA AMAYA

El fabricante sueco conmemora casi un siglo de vida desde que lanzó su primer vehículo: el ÖV4.
En abril de 1927, específicamente en la extinta planta de Volvo en Gotemburgo, Suecia, se ensambló el pionero de la familia sueca, el mismo que dio inicio a la exitosa historia que ha mantenido la firma en sus 90 años. Es por ello que la marca decidió celebrar su casi siglo de vida recordando al primero de sus vehículos. El ÖV4, un vehículo sencillo, abierto (como se usaba en la época), de cuatro plazas.

Este modelo alojaba un motor Penta de cuatro cilindros que producía 28 caballos de potencia y que estaba asociado a una caja de tres marchas. Con el tiempo, apareció una versión pick up.
Fue en la extinta planta de Gotemburgo que se ensambló el primer Volvo de la historia. Desde allí es que como principio básico, la marca se ha enfocado en destacar como una de las firmas más seguras e innovadoras del mundo.

“El primer Volvo salió de una cadena de montaje de Gotemburgo en 1927 y, desde entonces, no hemos dejado de crecer y derribar muros, en un camino plagado de innovaciones revolucionarias. Nuestra visión es ser la marca de
automóviles de lujo más progresiva y deseada del mundo”, expresó el gerente general de la firma en Chile,
Marcelo Haristoy.